CLICKBAIT?! No creerás lo que estás A PUNTO DE LEER!

 CLICKBAIT?! No creerás lo que estás A PUNTO DE LEER!

Parecerá raro decir esto, pero justo acabas de caer en el clickbait y si acabas de caer en este título realmente necesitas consejos para dejar de hacerlo, pero primero es importante que sepas de qué se trata y por qué se utiliza este tipo de contenido muchísimas veces. 

Para empezar, en sí este tipo de contenido es como un ciberanzuelo en el que realmente todos caímos alguna vez y a veces llega a ser hasta chistoso pero muchas otras veces resta valor al contenido. En esta era de la Web 2.0, donde hay un montón de todo y el contenido vuela resulta ser cada vez más difícil competir por la atención y a su vez se vuelve una guerra de clics constante, lo que resulta ser agotador tanto para el creador de contenido, como para el que consume. 

Tomando esto en cuenta, nunca te preguntaste ¿por qué somos tan curiosos en redes? Quizás no, pero justamente el clickbait funciona apelando directamente a nuestra curiosidad. Nosotros como seres humanos estamos buscando describir y enterarnos de absolutamente todo y los títulos engañosos se aprovechan de esto.  

¿Por qué nuestra mente cae una y otra y otra vez?

En sí, el ser humano está biológicamente motivado por el deseo de completar información,  es como cuando sabes que hay un chisme pero te enteras a medias y te mueres por completar la otra parte. Justamente esta necesidad de completar la información se activa con los títulos engañosos que prácticamente nos hacen sentir como que si no vemos ese vídeo o tik tok o leemos ese artículo o noticia nos perderemos de la información más importante de nuestras vidas.  

Otro culpable de esto son las redes sociales que refuerzan esto con su algoritmo porque si un título logra que hagas click es súper probable que te muestren contenido similar y así mil, veces teniendo un ciclo posiblemente infinito de sensacionalismo online. 

Estas son algunas señales claras de títulos engañosos: 

• Promesas sin respaldo: “Este alimento cura el cáncer”.

• Abuso del misterio: “Mira lo que encontró debajo de su cama…”

• Manipulación emocional: “Esta historia te hará llorar”.

• Trucos de formato: uso excesivo de mayúsculas o emojis.

El ARTE y LA TRAMPA DEL SENSACIONALISMO ONLINE

El sensacionalismo online es clave si se habla de clickbait, Se utilizan palabras impactantes, imágenes fuera de contexto o promesas exageradas para captar nuestra atención en medio del mar de información que navegamos diariamente. 

Algunas tácticas pueden ser: 

• La Intriga Incompleta: Se deja la información crucial fuera del titular, obligándote a hacer clic para obtener la respuesta.

• La Sorpresa Exagerada: Promete revelaciones impactantes que, en la mayoría de los casos, resultan ser bastante decepcionantes.

• La Apelación a la Emoción: Busca generar fuertes sentimientos como asombro, indignación o miedo para impulsarte a compartir y comentar.

• Los Números Mágicos: Listas como "Los 10 secretos..." o "Las 5 cosas que..." generan una sensación de información organizada y fácil de consumir.

Vale la pena el Click?

Realmente existe un debate súper grande sobre el clickbait y no se trata sólo de gustos personales, sino de su impacto real, es decir si realmente funciona si logra aportar valor o directamente destruye la confianza. 

Según BuzzSumo, los titulares que usan elementos típicos del clickbait  como preguntas intrigantes, promesas exageradas o frases incompletas tienen un 45% más de probabilidades de ser compartidos. Porque apelan a las emociones, despiertan la curiosidad en redes y generan una reacción casi automática. 

Parece interesante pero algunas plataformas que miden el comportamiento de los usuarios en medios digitales, revelaron que el 60% de las personas abandona la página en los primeros 15 segundos si el contenido no cumple con lo prometido. Eso significa que, aunque el título haya sido irresistible, si lo que encuentran no está a la altura se van y probablemente no vuelvan nunca más. 

Entonces podemos concluir que obviamente el clickbait si genera clicks, vistas y compartidos. Pero si no se usa con responsabilidad, puede generar frustración, abandono y pérdida de fidelidad. 

 

Clickbait de manera ética 

A ver tampoco vamos a satanizar el clickbait, o sea si eres creador de contenido y no sabes cómo captar la atención de las personas para que vean tus vídeos o lean tus artículos o recién estás empezando podrías utilizar esta técnica pero de forma correcta. 

1. Promete sólo lo que vas a cumplir: Un título atractivo no tiene por qué ser una mentira. Solo debe estar alineado con el contenido real.

2. Utiliza la intriga sin abusar del misterio: Despertar curiosidad es válido, pero evita dejar al lector completamente en la oscuridad.

3. Sé creativo, pero claro: Usa juegos de palabras, pero que no confundan ni manipulen.

4. Haz que el contenido realmente valga la pena: Si el artículo promete “5 consejos para mejorar tu productividad”, que esos consejos sean útiles, originales y bien explicados.

5. Aporta valor, no solo clics: La confianza del lector es más valiosa que una visita rápida.

En otras palabras, si lo que buscas es construir una comunidad real, con gente que vuelva a consumir tu contenido, la fórmula ideal es combinar un gancho atractivo con información que realmente aporte. Ahí es cuando nuestro ciberanzuelo se convierte en una estrategia legítima y no en una trampa barata.

Conclusión: 

Desde mi punto de vista usar clickbait no es un pecado, o sea está bien utilizar toda esta psicología del click para despertar la curiosidad en redes, pero si lo que ofreces al final solo son títulos engañosos y puro sensacionalismo online, la gente lo va a notar y ya no va a servir .

Creo que la clave está en equilibrar nuestro ciberanzuelo con contenido que realmente aporte valor. Porque sí, el título puede ser llamativo, curioso y hasta un poco exagerado, pero si no cumple lo que promete, es probable que la gente no solo cierre tu página, sino que también deje de confiar en vos. En mi experiencia un contenido que engancha pero también enseña, aporta o entretiene de verdad, vale mucho más que uno que solo busca un click rápido.

Así que no se trata de dejar de usar el clickbait, sino de aprender a usarlo bien. Ser honestos, creativos y estratégicos puede marcar la diferencia entre una audiencia fiel y un mar de visitas que nunca regresan.